¿Quién puede conceder un “get”?
Cualquier interpretación literal de la ley judía establece que solo un hombre puede comenzar los procedimiento de un divorcio religioso, y que debe hacerlo de manera voluntaria. Por lo general, un hombre hará que se redacte un sefer k’ritot (pergamino de separación) para terminar el matrimonio. Algunas autoridades ortodoxas todavía se aferran estrictamente a esta ley, pero las autoridades reformistas, conservadoras e incluso muchas autoridades ortodoxas concuerdan en que la mujer puede comenzar con el proceso de get al convencer al beit din (tribunal rabínico). Sin embargo, una mujer no puede conceder un get y no puede forzar a su esposo a que se lo conceda a ella en contra de su voluntad.
¿Quién puede necesitar un "get"?
Cualquier persona judía que haya estado casada con otro judío del sexo opuesto, es elegible para recibir un get. Si usted es una persona judía que contrajo matrimonio con alguien que no es judío o que se casó con alguien del mismo sexo, no es elegible para recibir un get y no necesita uno para que se le considere divorciado/a.
Si usted es una persona judía que no tiene un matrimonio religioso o que fue casado por un representante de otra religión (por ejemplo: ceremonia Unitarista, Episcopal, Metodista, Budista o Hinduísta), aún es elegible para recibir un get si su esposo/a es judío/a de nacimiento. Esto se debe a que la halacha (ley judía) acepta un matrimonio como válido una vez que se ha llevado a cabo, incluso si se realizó sin haber firmado un halacha (contrato de matrimonio judío).
¿Por qué alguien necesitaría un "get"?
Muchos/as rabinos/as reformistas están dispuestos/as a celebrar el matrimonio de una persona que solo tiene un divorcio civil de su primer/a esposo/a, pero es necesario obtener un get para volver a casarse en las comunidades ortodoxas y conservadoras. Es posible que los/as judíos/as reformistas, reconstruccionistas y no afiliados deban obtener un get para estar en conformidad con la más estricta interpretación de la ley.
Muchos judíos no religiosos eligen volver a casarse bajo la chuppah (boda dosel), firmar un ketubah (contrato nupcial) y tener una boda judía celebrada por un rabino/a o un/a cantor/a. Sin embargo, es posible que muchos matrimonios judíos no religiosos heterosexuales no se den cuenta de que para volver a casarse conforme la ley judía, tienen que obtener un divorcio halachic (ley judía). Si usted es judío/a no religioso/a, no afiliado/a, reformista o reconstruccionista que contrajo matrimonio en una boda judía, es recomendable que obtenga un get para que pueda volver a contraer matrimonio conforme la ley judía y lograr que ese matrimonio esté reconocido por todas las denominaciones (corrientes) del judaísmo. Sin embargo, si esto no es importante para usted, podrá decidir que no es necesario obtener un get.
Las autoridades ortodoxas sostienen que los/las judíos/as que contrajeron matrimonio en ceremonias civiles también deben obtener un get para poder volver a casarse conforme la ley judía. Si usted se casó conforme la ley civil, es posible que aún así desee obtener un get para estar en conformidad con la interpretación estricta de la ley.
¿Existen medidas proactivas que una mujer puede tomar para evitar llegar a ser una “agunah” en caso de que el matrimonio se termine?
Una de las mejores maneras de evitar la posibilidad de llegar a ser una agunah (“mujer encadenada”) es incluir una “Cláusula Lieberman” ya sea en un acuerdo prenupcial como en un halacha (contrato de matrimonio judío). La cláusula Lieberman se llama así por el Rabí Lieberman, el rabino reformista que la introdujo. Esta cláusula establece que en caso de divorcio, el esposo acuerda conceder un get y la mujer acuerda aceptarlo. Puede obtener más información sobre incluir este tipo de requisito en un acuerdo prenupcial en el sitio web de Beth Din of America El Contrato Prenupcial.
Muchas parejas religiosas firman un acuerdo prenupcial donde establecen los términos de un futuro get. Cada vez más rabinos/as reformistas, conservadores/as y ortodoxos/as modernos/as insisten en que las partes firmen el contrato prenupcial antes de oficializar un matrimonio. Algunos de los rabinos ortodoxos establecen que redactar este tipo de acuerdos en el ketubah es non-halachic (inválido conforme la ley judía), pero muchos rabinos/as ortodoxos/as estarán de acuerdo en apoyar que se redacte este tipo de cláusula en un acuerdo prenupcial. El rabinato conservador está de acuerdo con agregar una Cláusula Lieberman en un ketubah o en un acuerdo prenupcial. Un acuerdo judío prenupcial puede estar completamente separado de un acuerdo prenupcial laico (no religioso) que las partes pueden o no tener, y que puede referirse exclusivamente a la responsabilidad de ambas partes para conceder y aceptar un get, si es necesario.
Si la Cláusula Lieberman no se incluyó en un ketubah o en un contrato prenupcial, las parejas que ya están casadas pueden firmar un acuerdo post nupcial para incluir una Cláusula Lieberman. Esto puede parecer un paso extraño para las parejas casadas. Sin embargo, es otra forma de proteger los derechos de ambas partes en caso de que el matrimonio termine.